Tierras saqueadas por el neocolonialismo alimentando el consumismo del mundo occidental, aldeas destrozadas para construir gaseoductos, lagos contaminados por las empresas del "primer mundo", ciudades destruidas por guerras por el petróleo justificadas en nombre de "la paz, la libertad y la democracia". Multinacionales que acaban con selvas enteras y con las comunidades indígenas que allí habitan. Culturas dominantes oprimiendo a otras y provocando su desaparición. Millones de personas asesinadas por el odio. Pueblos condenados a vivir en campamentos de refugiados. Vidas destruidas por todo el mundo. Voces a gritos que a penas escuchamos.
Por todo esto y porque la sociedad en la que estamos inmers@s es causante directa o indirectamente de muchos de estos problemas, creemos fundamental la solidaridad desde aquí, y todas las formas con las que podamos ejercerla. Desde acciones de boikot, hasta darles voz con jornadas como estas.
Con estas ideas y muchas ganas nacen estas "Jornadas de opresión y conflictividad mundial", que esperamos se repitan en sucesivos años.